El uzbeco Sayfullo Saipov cumplirá cadena perpetua por la muerte de 8 personas (5 de ellos argentinos) en 2017 en Nueva York y por su colaboración con el grupo terrorista Estado Islámico, después de que el jurado no logró unanimidad para condenarlo a muerte. Lo anunció la Fiscalía en un comunicado
Saipov fue declarado culpable a fines de enero por la muerte de 8 personas a las que embistió con un camión. Tras ello, el jurado debía decidir si imponía la pena capital, como pidió el Departamento de Justicia en el momento de su imputación, bajo la administración del expresidente Donald Trump (2017-2021).
Pero la pena capital debe pronunciarse por unanimidad. En su defecto, el acusado cumple cadena perpetua.
El terrorista embistió con un camión a numerosas personas en un carril para bicicletas en Manhattan el 31 de octubre de 2017. El atentado dejó ocho muertos, entre ellos cinco amigos rosarinos. Además, causó varios heridos graves (incluido un niño de 14 años) que sufrieron amputaciones de miembros o daños cerebrales.
El terrorista que mató a cinco amigos rosarinos en Nueva York pasará el resto de su vida en prisión
La Fiscalía subrayó en su comunicado que Saipov pasará el resto de su vida en prisión “sin posibilidad de salir bajo fianza”. Actualmente, se encuentra alojado en la cárcel ADX de Colorado.
Al comenzar sus deliberaciones el 8 de marzo, el jurado había pedido al juez si podían deliberar sobre si el método actual de ejecución es la inyección letal y si podían mencionar también la moratoria en las ejecuciones pronunciada por el Fiscal General Merrick Garland en septiembre de 2021, pero ambas peticiones fueron desestimadas por el juez Vernon Broderick.
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El portal Law&Crime especificó que el jurado se puso de acuerdo en que las 22 horas diarias pasadas en una celda de aislamiento desde su detención constituían una circunstancia atenuante, mientras que no alcanzaron unanimidad sobre si creían que volvería a cometer crímenes violentos estando en prisión.
En Nueva York no se lleva a cabo una ejecución desde 1963, y si bien el estado ha declarado una moratoria sobre la pena de muerte, cabía la posibilidad de que en este caso se declarara al tratarse de un juicio celebrado por un tribunal federal.